Tiene una discapacidad y baila al ritmo de La Mona en su cama

360

Alan tiene 17 años, y convive con una discapacidad motriz desde que era un bebé. No puede levantarse de su cama, pero eso no le quita el ánimo y transita sus días con alegría, una alegría que nace en su fanatismo por la Mona Jiménez, que comenzó cuando era muy chiquito.

Hace tres años perdió a su mamá por una enfermedad en los riñones, y quedó a cargo de su abuela Noly, quien asegura que vivir con él le cambió la vida y ahora hasta ella se hizo fan. En su casa de Malvinas Argentinas suenan las canciones de Jiménez desde que se despierta hasta que se vuelve a dormir.

Sus canciones favoritas son «Tinta China» y «Oh mami», la que le dedica siempre a su abuela, a quien llama mami. Todos los días mira en su televisor videos, especialmente las intros de percusión de Bam Bam Miranda, a quien también admira. Desde su cama, baila con sus brazos imitando a su ídolo. 

Dice que lo que más le gusta de la Mona es su carisma: «Es un maestro, un capo, es el Mandamás, el único», enfatiza. 

Sueña con poder hablar con él, aunque sea en una videollamada. Desde su inocencia más pura, asegura que si tuviera la posibilidad de conocerlo en persona lo invitaría a ver la película «Coco»: «Para que recuerde algo de su mamá, de su abuela y también de su papá». 

(Fuente: Cuarteteando)