Tras la muerte de la presidenta de la Junta de Trinidad, Iris Romera, se generó un fuerte revuelo puertas adentro del espacio partidario, alboroto que terminó llegando a la sede del Partido Justicialista, donde pudo ser contenido y resuelto. Autoridades de Trinidad advirtieron que se hicieron transferencias por poco más de dos millones de pesos desde la cuenta de la junta a una cuenta personal de una militante. En el PJ citaron a la titular de la cuenta donde fueron a parar los fondos. La mujer adujo que lo hizo para evitar que el dinero terminara en la sucesión de Romera, argumento que reiteró el 16 de diciembre, cuando estuvo junto a sus compañeros en la casa donde funciona el órgano partidario trinitense.
El 1° de diciembre murió Iris Romera. La mujer, que fue diputada y concejal, ocupó durante más de una década la presidencia de la Junta de Trinidad. Capital es el único departamento cuyo territorio fue dividido en cuatro por el peronismo, con juntas en zona Centro, Desamparados, Concepción y Trinidad. Las juntas manejan fondos propios, que todos los meses son depositados por el PJ. Los recursos provienen de los aportes que deben hacer los funcionarios peronistas mensualmente, del orden del 8% del salario.
Según contaron las fuentes, todo habría ocurrido el mismo día que falleció Romera. Una autoridad trinitense notó varias transferencias desde la cuenta de la junta a una cuenta personal. Fue a través de home banking y por poco más de dos millones de pesos, que había ahorrado la presidenta fallecida. La persona que recibió los fondos es una mujer, conocida dentro de la casona de Mendoza y Lavalle, de extrema confianza de Romera.
Las autoridades de Trinidad dieron aviso en la PJ. El apoderado del partido, Jorge Oribe, citó a la mujer de las transferencias. Fue durante ese encuentro cuando la mujer dijo que había traspasado los fondos para evitar que entraran en la sucesión de Romera, en la que participarán sus sobrinos. Después de ese cara a cara, el dinero volvió a las arcas del peronismo, pero no a la Junta de Trinidad. No hubo denuncia en sede judicial.
Luego de ese episodio, el sábado 16 de diciembre hubo una convocatoria dentro de la Junta. Además de poner en funciones a las nuevas autoridades tras el fallecimiento de Romera, se habló del tema de las transferencias. La militante trinitense dio el mismo argumento que esgrimió ante Oribe. No fue expulsada y todo quedó sepultado bajo el manto del malentendido.
El 16 se firmó también un acta en donde quedó asentado el nuevo organigrama de autoridades, que ahora encabeza Sergio Juárez y secunda Alicia Olivares. Ahora mediante nota le reclamarán al PJ central que devuelva los fondos a Trinidad “porque en este difícil contexto” serán más que vitales los recursos hasta para pagar los servicios.
En cuanto a los aportes, el peronismo orgánicamente dispuso que intendentes y diputados continúen contribuyendo el 8% de sus salarios. En las Juntas no han recibido notificación, pero todo indica que no habrá más caja chica para estos espacios, que deberán arreglarse por sus propios medios. Hasta noviembre del 2023, cada una de las 23 juntas departamentales recibía en promedio un millón de pesos.
(Fuente: Tiempo de San Juan)
