Un preso denunció a efectivos del Servicio Penitenciario Provincial por golpearlo y, ahora, los uniformados son investigados por la UFI Delitos Especiales. El interno en cuestión fue identificado como Lucas Suárez Garrido, quien mantiene una condena de 4 años por delitos contra la propiedad y está por quedar libre.
El mismo acusó a los funcionarios policiales el pasado miércoles por la mañana, por intermedio de un hábeas corpus, de apremios ilegales, por lo que estos están en la mira. También, los investigan por desobediencia a una orden judicial y por falsificar un acta.
El reo aseguró que lo amenazaron y lo golpearon. Ante eso, denunció que tenía miedo y solicitó el traslado del pabellón 2, del sector 4. De ese modo, lo derivaron a otro, con el fin de protegerlo.
En ese marco, el juez de garantías les solicitó a los penitenciarios que brinden un informe de lo ocurrido, pero sospechan de que estos llevaron al interno a una oficina, lo increparon y, posteriormente, enviaron un escrito al magistrado, afirmando que el reo negaba las agresiones y hostigaciones.
Sin embargo, la firma del interno era distinta, por lo que sospecharon de la veracidad del escrito. Por lo tanto, ahora son investigados por desobediencia a una orden y por falsificación. En ese aspecto, se añade que el preso ratificó las agresiones e insistió en que recibió más amenazas por parte de los uniformados.
Ante todo esto, el preso ya no está en el Penal, por orden del juez, quien lo dispuso para resguardar su vida. De ese modo, lo alojaron en una Comisaría de la Policía.
(Fuente: Diario Movil)
