Desde este miércoles se espera un interesante movimiento de viajeros en San Juan por Semana Santa y los efectivos policiales ya estarán apostados en los distintos destinos más demandados para realizar controles. Esta vez, se regresará a los ejes tradicionales después de la flexibilización de medidas sanitarias.
«En el operativo especial se afectará a más de 1000 efectivos que van a estar concentrados en los controles de alcoholemia y también en todo lo concerniente a la seguridad para evitar siniestros viales. Resaltamos que no será igual que el año pasado en el que el esfuerzo estaba en mantener las medidas de sanitización, de ver cuántas personas viajaban, controlar temperaturas y permisos de circulación, entre otras», contó el subsecretario de Seguridad, Abel Hernández.
Los policías llegarán a los puntos de ingreso y zonas de mayor circulación de los departamentos alejados, en Ullum, Zonda y Sarmiento y el convocante circuito Difunta Correa y San Expedito. «Hay muchos lugares a los que los visitantes llegan en motos o lo hacen a pie, como es el caso de Vallecito. Estaremos acompañando a los peregrinos e instando que usen la senda correspondiente para no exponerse a la ruta», explicó.
Marcó que en las noches o zonas de playas de río y dique. «El consumo de bebidas alcohólicas se incrementa y la figura de conductor designado no está debidamente instalado en San Juan, sobre todo entre los jóvenes. Allí se pondrá especial atención», dijo.
En tanto, en el Gran San Juan «nos abocaremos a las tareas de vigilancia porque las casas vacías pueden ser blanco de escruches. Con el apoyo constante de CISEM, se coordinarán las labores preventivas».
