El Gobierno sanjuanino echó a una empleada del Ministerio de Educación de la provincia por un presunto fraude a través del desvío de fondos por más de 1.300.000 pesos a su cuenta bancaria. La presunta maniobra fue descubierta y denunciada en la Justicia en 2019. También se le inició un sumario administrativo en la cartera, que concluyó con la dura sanción de dejarla cesante en su trabajo.
La decisión la tomó el Ministerio de Educación y el Poder Ejecutivo provincial dictó un decreto por el cual declararon cesante a Sandra Deolinda Maya, quien era planta permanente con categoría 14 y cumplía funciones en la División Sueldos. La resolución se hizo pública este miércoles en el Boletín Oficial, donde se señala el proceso administrativo iniciado contra la empleada pública. Además, se hace saber que puede recurrir la medida.
En la misma publicación también se consigna que a raíz del caso se denunció a Maya y abrieron una causa penal en el Segundo Juzgado de Instrucción por el presunto delito de fraude en perjuicio de la administración pública.
La maniobra delictiva fue descubierta luego de que detectarán que, entre el 1 de noviembre de 2018 y el 11 de junio de 2019, realizaron liquidaciones irregulares de sueldos y que ese dinero fue acreditado a una misma cuenta bancaria. Esa cuenta pertenecía a la empleada, según el documento.
Por lo que se desprende del informe, la mujer tenía acceso a las claves para liquidar sueldos. Al parecer, eso era aprovechado por ella para realizar esos desvíos de fondos. A partir de los datos bancarios y el seguimiento informático, detectaron 22 liquidaciones por un monto total de 1.310.099,70 pesos a nombres de distintas personas que, sospechosamente, tenían en común una misma cuenta, la de Sandra Deolinda Maya. En el sumario le atribuyeron haber violado e incumplido las normas del Estatuto de la Administración Pública de la provincia. El 15 de octubre de 2020 dieron por clausurada la investigación interna y ahora se conoció la decisión del Ejecutivo, que resolvió sancionar a la empleada con la cesantía.
(Fuente: Tiempo de San Juan)