Los dos casos ocurrieron en Villa Mercedes. En ambos describieron a personas que se movilizaban en un Toyota Corolla. Los hechos se produjeron en un momento en que la sociedad sanluiseña está conmocionada por la desaparición de Guadalupe Lucero.
Denuncian que, en casos distintos, quisieron secuestrar a dos niños en un auto blanco, en la provincia de San Luis. Estos hechos se registraron en un momento en donde esa sociedad está alerta por la desaparición de Guadalupe Lucero, de 5 años.
Sofía Bianchini denunció que el 8 de julio cerca de las 22:30 caminaba con su pareja y sus dos hijos, uno de tres y una bebé de nueve meses, por calle Sebastián Pizzaro cerca de la intersección con 25 de Mayo, en Villa Mercedes, cuando se percataron que un vehículo los siguió por varias cuadras.
“Daban vuelta la manzana, luego volvían a pasar y observaban mucho a mi bebé”, indicó la mujer en declaraciones a Radio FM Latina.
En su relato dijo que en un momento el Toyota Corolla blanco se frenó y los ocupantes intentaron bajarse, pero justo había un vecino que estaba arreglando su auto en la calle y decidieron darse a la fuga.
Según la descripción, el vehículo tenía vidrios polarizados y franjas negras en la parte inferior de la puerta del conductor. También señaló que el rodado era conducido por un hombre “pelado” y lo acompañaba una “chica rubia”.
“Hice la denuncia en la Comisaría 24ta. La Policía me la recibió en un papel común, sólo pidieron mis datos y las características de las personas que iban en el auto”, manifestó.
La mujer indicó que es la primera vez que le toca pasar por una situación así: “Si tienen niños, no anden hasta tarde y cuiden a las criaturas”.
En ese sentido, Bianchini aseguró que vive con temor: “Tengo miedo por mis dos niños”.
El hermano de la mujer, en declaraciones a Radio La Bomba afirmó que ella “está mal, no quiere salir a comprar ni a la calle por lo que le pasó”.
Otro de los casos sucedió a plena luz del día. Camila Alén publicó en su perfil de Facebook que intentaron llevarse a su hijo en Villa Mercedes.
“Una chica bajó del auto y le hacía señas a mi bebé que jugaba en el patio de adelante de la casa. Por suerte salí y se subió rápido al vehículo, no alcancé a ver la patente porque se fueron muy rápido, pero estuvieron parados ahí como 20 minutos antes de que se lo quisieran llevar, estoy temblando”, expuso.
Fuente: El Chorrillero.
