Aborto judicializado en San Juan: las partes analizan demandas cruzadas

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La mujer a la que su ex quería impedirle un aborto podría demandarlo por agraviarla. El progenitor advierte que podría tomar medidas legales.

Este martes, finalmente se supo que la sanjuanina a la que su ex quería impedirle abortar, pudo realizarse la práctica en el marco de la ley, en un hospital alejado del Gran San Juan. Así, la medida cautelar presentada por el progenitor quedaría abstracta pero el conflicto legal podría no terminar allí. 

Reinaldo Bedini, representante letrado de la mujer, explicó a Tiempo de San Juan que ella podría tomar medidas judiciales contra su ex por haberla agraviado.

«La vuelve a forzar con su cuerpo a llevar adelante una gestación contra su voluntad. La Ley de Protección Integral de la Mujer, habla de violencia sexual, no solamente cuando el autor abusa de tu cuerpo, sino también cuando impone restricciones en torno a la vida reproductiva de las mujeres», detalló Bedini. 

Ahora, la mujer tendría la posibilidad de demandar en el fuero civil a su ex cónyuge. «Ella ahora está en shock. Él figura como víctima cuando en realidad es el victimario y la expuso públicamente», explicó el abogado. 

Bedini, citó los tratados internacionales de Violencia contra la Mujer que «obliga a la interpretación de la perspectiva de género». 

El patrocinante legal de la mujer dejó la puerta abierta para una futura demanda, aunque también adelantó que no ha sido instruido para hacerlo. 

En la vereda de enfrente, uno de los representantes legales de Franco, el abogado Martín Zuleta, dijo a este medio que la decisión de la mujer fue “arbitraria” y advirtió que sopesan medidas legales en el fuero civil. 

«No hemos tenido acceso a la información, en el expediente electrónico no hemos visto movimiento en el día de hoy», refirió el letrado al cierre de la edición. «Queremos ver los alcances de lo que se ha presentado, en este momento estamos intranquilos con la situación porque se ha manejado con mucho hermetismo», dijo. Incluso cuestionó la forma de la práctica: «El estado del embarazo estaba bastante avanzado». 

Sobre el panorama judicial, consideró que la decisión de la ex esposa de Franco es «arbitraria» porque, aunque está amparada por la ley, «tendría que haber concurrido a la Justicia para reclamar el reconocimiento de su derecho». Sin embargo, según entiende Zuleta, «se recurrió a vías de hecho». 

Al respecto, enfatizó que la mujer estaba unida a su representado por un vínculo matrimonial. «Ellos tienen deberes y obligaciones que son mutuas y puede analizarse como un incumplimiento civil, con daño civil, aunque no exista delito penal», dijo el abogado, que también reconoció que, una vez que practicado el aborto, la presentación para declarar la inconsitucionalidad de la Interrupción Voluntaria del Embarazo, cayó en «abstracto».