Se cumple una semana del terremoto que afectó a la provincia dejando daños materiales en varios departamentos. Luego de los relevamientos realizados por personal del Ministerio de Desarrollo Humano, en conjunto con equipos municipales y de otros organismos del Estado Provincial, se procedió a la asistencia ordenada y constantes para las familias afectadas.
En Pocito, Rivadavia, Caucete, Sarmiento, Rawson y Santa Lucía fueron varias las casas que cayeron al piso de manera completa, sumando problemas de estructura y sostenimiento en cientos de viviendas más. Luego de recabar los datos necesarios, la asistencia comenzó a tomar forma más permanente, ya que, en las primeras horas posteriores al sismo, sólo se había asistido con agua y alimentos.
Desde el Ministerio de Desarrollo Humano y Promoción Social, se envió a cada uno de estos departamentos cargamentos de palos y nalion para enfrentar los inconvenientes más urgentes. Con el pasar de las horas, esta ayuda se convirtió en cemento, machimbre, emulsión asfáltica y viandas de alimentos en las zonas más afectadas donde tampoco se podía cocinar.
La estructura de asistencia del ministerio se puso a pleno a trabajar, desde los equipos propios hasta contar con la ayuda del personal del RIM 22 y las instituciones que componen el Voluntariado Social. Todos los elementos fueron coordinados para que el apoyo llegara a quienes más lo necesitaban y de la manera más organizada posible para evitar mayores complicaciones.
Quienes se inscribieron para ser parte del Voluntariado Social realizaron tareas de apoyo logístico, relevamientos de datos, organizando actividades recreativas para los niños y niñas de los asentamientos y repartiendo las viandas en cada puesto de alimentación.
